PRINCIPIO
30
Dado que los milagros reconocen el espíritu,
ajustan los niveles de percepción y los muestran en su debido lugar. Esto sitúa
al espíritu en el centro, desde donde puede comunicarse directamente.
"Es imposible no creer en lo que ves, pero es igualmente imposible ver lo que no crees. La percepción se construye sobre la base de la experiencia, y la experiencia conduce a las creencias. La percepción no se estabiliza hasta que las creencias se cimientan. De hecho, pues, lo que ves es lo que crees" (T-11.VI.1:1-4).
Compartiendo una de
las ideas desarrollada en el Curso de Milagros, diremos que la única carencia
que realmente necesitamos corregir es nuestra sensación de estar separados de
Dios.
Pero, ¿por qué
surgió esa percepción de separación?
De hecho, esa percepción de separación jamás habría surgido si no hubiésemos distorsionado la percepción
de la realidad, lo cual nos llevó a percibirnos como alguien necesitado.
En el Capítulo I
del Texto, en el apartado VII, dedicado a las “distorsiones de los impulsos
milagrosos”, podemos leer lo siguiente:
“Tus percepciones
distorsionadas producen una densa envoltura alrededor de los impulsos
milagrosos, dificultándoles el que lleguen a tu conciencia. La confusión de los
impulsos milagrosos con los impulsos físicos es una de las distorsiones básicas
de la percepción. Los impulsos físicos son impulsos milagrosos mal canalizados.
Todo placer real procede de hacer la Voluntad de Dios. Esto es así porque no hacer Su
Voluntad es una negación del Ser. La negación del Ser da lugar a ilusiones,
mientras que la corrección del error nos libera del mismo. No te engañes a ti
mismo creyendo que puedes relacionarte en paz con Dios o con tus hermanos a
través de algo externo" (T-1.VII.1:1-7).
"Criatura de Dios,
fuiste creado para crear lo bueno, lo hermoso y lo santo. No te olvides de eso.
El Amor de Dios, por un breve período de tiempo, todavía tiene que expresarse
de un cuerpo a otro, ya que la visión es aún muy tenue. El mejor uso que puedes
hacer del cuerpo es utilizarlo para que te ayude a ampliar tu percepción, de
forma que puedas alcanzar la verdadera visión de la que el ojo físico es
incapaz. Aprender a hacer esto es la
única utilidad real del cuerpo” (T-1.VII.2:1-5).
Para entrar en
materia no está nada mal. Tendremos que ahondar en la idea de la “percepción”,
pues como hemos adelantado, se nos presenta como el resultado al que ha dado
lugar la orientación de nuestra mente, dando lugar a un estado de confusión
entre niveles o lo que es lo mismo, la dualidad espíritu-cuerpo.
¿Cómo se origina la percepción?
"La
proyección da lugar a la percepción" (T-21.In.1:1). "Debemos conocer, que la
capacidad de extenderse es un aspecto fundamental de Dios que Él le dio a Su
Hijo" (T-2.I.1:1).
"En la creación, Dios Se extendió a Sí Mismo a Sus creaciones y les
infundió la misma amorosa Voluntad de crear que Él posee. No sólo
fuiste plenamente creado, sino que fuiste creado perfecto" (T-2.I.1:2-3).
Al ser
creados a semejanza de Dios hemos
heredado su capacidad creativa. "Ningún Hijo de Dios puede perder esa facultad,
ya que es inherente a lo que él es, pero podemos usarla de forma inadecuada al
proyectar. El uso inadecuado de la extensión -la proyección- tiene
lugar cuando creemos que existe en
nosotros alguna carencia o vacuidad, y que podemos suplirla con nuestras
propias ideas, en lugar de con la verdad" (T-2.I.1:6-7).
Nuestra
condición divina nos faculta para que el mundo que vemos se componga de aquello
con lo que lo hemos dotado, lo que significa que, es importante para nosotros.
Es el testimonio de nuestro estado mental, la imagen externa de una condición
interna.
Podemos
leer en el Curso, que “tal como el hombre piense, así percibirá” (T-21.In.1:6). En este sentido, la percepción es un
resultado, no una causa.
Debemos
dedicar una especial atención a lo que acabamos de explicar, ya que la
proyección de nuestros pensamientos nos desvelará aquello que se encuentra en
nuestra mente, es decir, si emitimos juicios condenatorios sobre el mundo,
preguntémonos dónde nos estamos condenando; si contemplamos desastres y
catástrofes, preguntémonos dónde se encuentra el caos en nuestro interior. En
definitiva, lo que veamos dará testimonio de nuestra elección y nos permitirá
reconocer cuál de ellas elegimos. El mundo que vemos tan sólo nos muestra
cuánta dicha nos hemos permitido ver en nosotros y aceptar como nuestra. Si
esta afirmación es verdad, el poder de dar dicha tiene
entonces que encontrarse en nosotros.
"La percepción, que
es intrínsecamente enjuiciadora, comenzó sólo después de la separación. Desde
entonces nadie ha estado seguro de nada" (T-3.V.1:1-2).
"Desde que se produjo la separación ha
habido una gran confusión entre las palabras "crear" y
"fabricar”. La diferencia está en que cuando fabricamos algo, lo hacemos
como resultado de una sensación específica de carencia o de necesidad" T-3.V.2:1-2).
"Es esencial hacer
una clara distinción entre lo que se crea y lo que se fabrica. Toda forma de
curación se basa en esta corrección fundamental de percepción de niveles" (T-2.IV.A-12:1-2).
"El poder del
milagro para ajustar niveles genera la percepción correcta que da lugar a la
curación. Hasta que eso no ocurra será imposible entender lo que es la
curación. El perdón es un gesto vacío a menos que conlleve corrección. Sin
ella, lo que hace es básicamente juzgar, en vez de sanar" (T-2.IV.A-15:1-4).
“La percepción
entraña selectividad a todo nivel. Es un proceso continuo de aceptación y
rechazo, de organización y reorganización, de substitución y cambio. Evaluar
es un aspecto esencial de la percepción, ya que para poder seleccionar es
necesario juzgar" (T-3.V.7:6-8).
"¿Qué le ocurre a la
percepción en ausencia de juicios, o de nada que no sea perfecta igualdad?
Percibir se vuelve imposible. La verdad sólo se puede conocer. Toda ella es
igualmente verdadera, y, conocer cualquier parte de ella es conocerla en su
totalidad. Únicamente la percepción entraña una conciencia parcial. El
conocimiento transciende las leyes que gobiernan la percepción porque un
conocimiento parcial es imposible. El conocimiento es uno y no tiene partes
separadas” (T-3.V.8:1-7)).
¿Se puede sanar la
percepción sabiendo que es un error de la mente?
Ya en el punto
anterior adelantábamos que la curación se basa en una corrección de percepción
de niveles y es el poder del milagro el que genera la percepción correcta que
da lugar a la curación. De ello se deduce, que podemos hablar de percepción
errónea y de percepción verdadera. La primera juzga y la segunda sana.
"El perdón es lo que
sana la percepción de la separación. Es necesario que percibamos correctamente
a nuestro hermano debido a que las mentes han elegido considerarse a sí mismas
como entidades separadas" (T-3.V.9:1-2).
"La percepción se
basa en un estado de separación, así que cada vez que de alguna manera
percibimos, tendremos necesidad de curación" (T-3.V.10:3).
¿Cómo debemos
entender la percepción verdadera?
La percepción
verdadera, o percepción inocente, significa que nunca percibimos falsamente y
que siempre vemos correctamente. Dicho de una manera más llana, significa que
nunca vemos lo que no existe y siempre vemos lo que sí existe.
"La percepción es
temporal. Al ser un atributo de la creencia en el espacio y en el tiempo, es
susceptible de producir miedo o amor. Las percepciones falsas producen miedo y
las verdaderas fomentan el amor, mas ninguna de ellas brinda certeza porque
toda percepción está sujeta a cambios. Por eso es por lo que la percepción no
es conocimiento. La verdadera percepción es la base del conocimiento, pero
gozar de conocimiento es la afirmación de la verdad y esto se encuentra
allende cualquier percepción" (T-3.III.1:6-10).
"El milagro, al ser
una manera de percibir, no es conocimiento" (T-3.III.2:4).
"El primer paso en el proceso de
deshacer lo ilusorio es cuestionarlo. El milagro -la respuesta correcta- lo
corrige" (T-3.III.2:6-7).
"La forma en que
percibimos en cualquier momento dado determina nuestro comportamiento, y las
acciones sólo pueden ocurrir en el tiempo" (T-3.III.2:9).
“No se puede hacer
demasiado hincapié en el hecho de que corregir la percepción es simplemente un
expediente temporal. Dicha corrección es necesaria únicamente porque la
percepción falsa es un obstáculo para el conocimiento, mientras que la percepción
fidedigna es un trampolín hacia él. El valor de la percepción correcta reside
en la conclusión inevitable de que toda percepción es innecesaria. Esto elimina
el obstáculo por completo. Te preguntarás cómo puede ser posible esto mientras
parezca que vives en este mundo. Esa es una pregunta razonable. No obstante,
tienes que asegurarte de que realmente la entiendes. ¿Quién es el
"tú" que vive en este mundo? El espíritu es inmortal, y la
inmortalidad es un estado permanente. El espíritu es tan verdadero ahora como
siempre lo fue y lo será siempre, ya que no entraña cambios de ninguna clase.
No es un continuo, ni se puede entender tampoco comparándolo con un opuesto. El
conocimiento nunca admite comparaciones. En eso estriba su diferencia principal
con respecto a cualquier otra cosa que la mente pueda comprender” (T-4.II.11:1-13).
"La percepción no es
conocimiento, pero puede ser transferida al conocimiento, o cruzar hasta
él" (T-5.I.6:5).
Esta labor de transferencia no la
podemos realizar por nosotros mismos, necesitamos ayuda para ello.
"Los pensamientos se originan en
la mente del pensador, y desde ahí se extienden hacia afuera. Esto es tan
cierto del Pensamiento de Dios como del nuestro. Puesto que nuestra mente está
dividida, podemos percibir y también pensar. No obstante, la percepción no
puede eludir las leyes básicas de la mente. Percibimos desde nuestra mente y
proyectamos nuestras percepciones al exterior. Aunque la percepción es irreal,
el Espíritu Santo puede usarla provechosamente por el .hecho de que nosotros la
concebimos. Él puede inspirarnos cualquier percepción y canalizarla hacia
Dios" (T-6.II.9:1-7).
"La fuerza
de la percepción correcta es tan grande que pone a la mente en armonía con la
Mente de Dios, pues se encuentra al servicio de Su Voz, la cual mora en todos
vosotros" (T-7.IV.5:7).
Debemos tener
presente de que somos nosotros los que hemos inventado la percepción, y ésta
perdurará mientras la sigamos deseando.
En el Capítulo XI del Curso,
podemos leer:
“Ha habido mucha confusión con
respecto a lo que significa la percepción, debido a que la palabra se usa con el significado de
"conciencia" y también con el de "interpretación de la
conciencia". No obstante, no puedes ser consciente sin interpretar, pues
lo
que
percibes es tu propia interpretación" (T11.VI.2:5-6).
"Este curso es muy claro. Si no lo ves así, es porque estás
haciendo interpretaciones contra él, y, por lo tanto, no crees lo que dice. Y puesto que lo
que crees determina tu percepción, no percibes el significado del
curso y, consecuentemente, no lo aceptas. Con todo, diferentes experiencias
conducen a diferentes creencias, y a través de éstas, a diferentes percepciones.
Pues las percepciones se aprenden mediante creencias, y la experiencia ciertamente enseña.
Te estoy conduciendo a una nueva clase de experiencia que cada vez
estarás menos dispuesto a negar: Aprender de Cristo es fácil, pues percibir con
Él no entraña ningún esfuerzo. Sus percepciones son tu conciencia natural, y
lo único que te fatiga son las distorsiones que introduces en ésta. Deja que sea
el Cristo en ti Quien interprete por ti, y no trates de limitar lo que ves con
creencias pueriles indignas del Hijo de Dios. Pues hasta que Cristo no sea aceptado
completamente, el Hijo de Dios se considerará a sí mismo huérfano” (T-11.VI.3:1-10).
¿Se puede percibir el mundo
real?
Para dar respuesta a esta
cuestión, expondremos parte del contenido recogido en el apartado VII, del
Capítulo XI del Curso de Milagros “La condición de la realidad”:
“El mundo que tú percibes no pudo haber sido creado
por el Padre, pues el mundo no es tal como tú lo ves. Dios creó únicamente lo
eterno, y todo lo que tú ves es perecedero. Por lo tanto, tiene que haber otro
mundo que no estás viendo. La Biblia habla de un nuevo Cielo y de una nueva tierra, mas esto no puede ser
cierto en un sentido literal, pues lo que es eterno no puede volver a ser
creado. Percibir de manera diferente es sencillamente percibir de nuevo, lo
cual implica que antes, o en el ínterin, no estabas percibiendo en absoluto.
¿Cuál es entonces el mundo que le espera a tu percepción cuando
finalmente lo veas?" (T-11.VII.1:1-6)
"Todo pensamiento amoroso que el Hijo de Dios jamás
haya tenido es eterno. Los pensamientos amorosos que su mente percibe en este
mundo constituyen la única realidad de éste. Siguen siendo percepciones porque
él todavía cree estar separado. Mas son eternos porque son amorosos. Y al ser amorosos son semejantes al Padre, y, por lo tanto, no pueden
morir. El mundo real ciertamente se puede percibir. Lo único que ello requiere
es que estés dispuesto a no percibir nada más. Pues si percibes tanto el bien
como el mal, estarás aceptando lo falso y lo verdadero, y no estarás
distinguiendo claramente entre ellos" (T-11.VII.2:1-8).
"El ego tal vez vea algo bueno, pero nunca ve sólo lo
bueno. Esa es la razón de que sus percepciones sean tan variables.
No rechaza la bondad por completo, pues eso sería inaceptable para ti. Pero
siempre añade a lo real algo que no es real, confundiendo así la ilusión con la
realidad. Pues las percepciones no pueden ser parcialmente verdaderas. Si crees
tanto en la verdad como en la ilusión, no podrás saber cuál de ellas es cierta.
Para establecer tu propia autonomía trataste de crear de manera diferente de
como crea tu Padre, creyendo que lo que hiciste podía ser distinto de Él. No
obstante, todo lo que es verdad es como Él. Percibir únicamente el mundo real
te conducirá al Cielo real, ya que te capacitará para comprenderlo” (T-11.VII.3:1-9).
"Soy responsable de lo que veo. Elijo los sentimientos que experimento y decido el objetivo que quiero alcanzar.Y todo lo que parece sucederme yo mismo lo he pedido, y se me concede tal como lo pedí" (T-21.II.2:3-5).
Te sigo desde 2017, es la primera vez que escribribo, me ecanta leer tus reflexiones, acudo a este sitio, muchas gracias, aprecio tu manera de explicar, te recomiendo a las personas que practican el curso
ResponderEliminar