III. Percepción y elección (4ª parte).
4. El mundo tiene otro Hacedor, el Corrector simultáneo de la creencia desquiciada de que es posible establecer y mantener algo sin un vínculo que lo mantenga dentro de las leyes de Dios, no como la ley en sí conserva al universo tal como Dios lo creó, sino en una forma que se adapte a las necesidades que el Hijo de Dios cree tener. 2No obstante, error corregido es error eliminado. 3Y de este modo, Dios ha seguido protegiendo a Su Hijo, incluso en su error.
Este fragmento revela la presencia activa del Espíritu Santo como Corrector de la percepción errónea, y la fidelidad de Dios hacia Su Hijo incluso en medio del error.
¿Cuál es el mensaje principal de este pasaje?
El mensaje central es que, aunque el mundo fue construido desde una creencia equivocada —la separación de Dios—, existe un Corrector que lo acompaña: el Espíritu Santo. Él adapta la percepción del mundo a las necesidades que el Hijo de Dios cree tener, sin validar la ilusión, sino usándola para guiar hacia la verdad. El error, una vez corregido, desaparece. Así, Dios protege a Su Hijo incluso cuando este se equivoca, asegurando que nunca esté completamente perdido.
¿Cómo aplicar esta enseñanza en la vida cotidiana?
En la vida cotidiana, este punto nos recuerda que no estamos solos en nuestra confusión. Aunque vivamos desde creencias erróneas —como la separación, el miedo o el juicio—, hay una guía interna que corrige suavemente nuestra percepción. Cada vez que elegimos ver con amor, el error se disuelve.
Aplicación práctica:
- Cuando te sientas atrapado en una emoción negativa, recuerda que hay una parte de ti que sabe cómo volver a la paz.
- En momentos de duda, puedes invocar al Corrector interno para reinterpretar la situación desde la verdad.
Ejemplos concretos:
- Ejemplo real: Laura se siente culpable por haber gritado a su hijo. Cree que ha fallado como madre. Pero al detenerse y pedir guía interior, siente una voz suave que le recuerda que puede elegir de nuevo. Decide hablar con su hijo desde el corazón y reparar con amor.
- Ejemplo simbólico: Un niño construye un castillo de arena lejos del mar, creyendo que así estará seguro. Pero el viento lo derrumba. Entonces aparece una figura luminosa que le enseña a construir cerca del agua, donde la arena se mantiene firme. El niño aprende que no está solo, y que hay una forma mejor.
5. Citas del Texto relacionadas con el contenido del punto:
- "El Espíritu Santo ve el mundo como un recurso de enseñanza para llevarte a casa." (T-5.III.11:1)
- "El error no puede sobrevivir cuando se le lleva ante la verdad." (T-17.I.5:1)
- "Dios no abandonó a Su Hijo. El Espíritu Santo permanece con él en el mundo de la percepción." (T-6.V.C.1:2)
Cuestiones para la reflexión:
- ¿Estoy dispuesto a permitir que el Corrector transforme mi percepción?
- ¿Qué errores sigo defendiendo como reales, en lugar de entregarlos para su corrección?
- ¿Cómo experimento la protección de Dios incluso en medio de mis equivocaciones?
Conclusión:
Este punto nos enseña que el Espíritu Santo actúa como Corrector constante de nuestras percepciones erróneas. Aunque el mundo fue construido desde la separación, Dios no nos ha abandonado. Su Amor se manifiesta en cada corrección, en cada acto de guía, en cada momento de paz que elegimos.
“Error corregido es error eliminado.”
Una invitación: Hoy, entrega un pensamiento de juicio o culpa al Corrector interno. Observa cómo se transforma en paz.

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