QUINTO REPASO
LECCIÓN 173
Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.
1. (155) Me haré a un lado y dejaré que Él me muestre el camino.
2Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.
2. (156) Camino con Dios en perfecta santidad.
2Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.
¿Qué me enseña esta lección?
1. (155) Me haré a un lado y dejaré que Él me muestre el camino.
2Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.
He creído gobernar el timón de mi nave, sin embargo, nunca he sido dueño de mi destino.
He deseado dirigir mi rumbo hacia aguas tranquilas, pero aún así no he podido evitar hacer frente a vientos desenfrenados y a furiosas tormentas.
A veces, mis vigías han confundido la tierra firme, con aguas pantanosas…
En ocasiones, mis días de paz se han visto alterados por el acoso de terribles pesadillas que han enturbiado mis horas de vigilia y de sueños.
Hoy me haré un lado, pues al final de mi travesía he descubierto que, tan sólo Dios, es el capitán de mi reino.
Hoy me haré, felizmente, a un lado y cederé el timón de mi nave a mi Creador, pues Él me mostrará el Verdadero Camino.
2. (156) Camino con Dios en perfecta santidad.
2Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.
Cuando elijo ver con los ojos del cuerpo, a pesar de verme rodeado por las muchas criaturas que viven en el mundo, no puedo evitar sentir una profunda soledad.
Sí, cuando me identifico con el ego, no puedo evitar caer en el pesimismo, en la desilusión, en la apatía, en el desánimo, en la confusión, en un querer y no poder… confundo fácilmente el amor, con el deseo…
Buscamos relaciones especiales, en un intento de compensar todas esas emociones contradictorias. Cuando las encontramos, en un intento de compensar nuestras necesidades internas, proyectamos sobre el otro nuestras sombras y de este modo, nos sentimos aliviados al poder juzgarlas fuera de nuestra identidad…
Aquello que no es santo, aquello que no es consecuencia de la Verdadera Unidad, del Amor, de la Eternidad, nunca podrá convertirse en nuestro perfecto acompañante… pues la Ilusión y la Verdad no pueden coexistir.
Cuando caminamos con nuestro Invitado, la necesidad deja de ser nuestra realidad. En su lugar Todo es Abundancia.
Gracias J.J
ResponderEliminarGracias infinitas 🙏
ResponderEliminarCada día entrego el timón de mi vida a Dios , porque el no se equivoca, a no ser que yo necesite aprender alguna lección, Dios con amor conduce mi vida
ResponderEliminarAmen y Graciasssss
ResponderEliminarGracias
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