¿Qué me enseña esta lección?
Los estudios realizados en psicología sobre la evolución de los diferentes estados de conciencia que afectan las distintas etapas de crecimiento a nivel humano, nos revelan, que, a la edad de los 14 años, aproximadamente, se afronta una etapa en la que el uso de las emociones, sentimientos y deseos adquiere un especial protagonismo en detrimento de otros valores, como los mentales e intelectuales. El resurgir de la naturaleza pasional es visible a partir de esta etapa y la adolescencia se caracteriza por un proceso de aprendizaje en el que se abandona el "Yo Familiar" y se adquiere el "Yo Individual".
Es a partir de los 21 años, aproximadamente, cuando el individuo afronta un nuevo proceso de crecimiento de la conciencia y comienza a adoptar un comportamiento más social y racional, donde las relaciones están basadas en el intercambio y no en el individualismo. Durante esta etapa, se afronta el aprendizaje de un nuevo elemento, el mental.
No podemos pretender que en los albores de este proceso se tenga un pleno dominio del uso de la mente, se requerirán años de evolución y aprendizaje para que lleguemos a adquirir la lucidez y comprensión de los conceptos y de las ideas de una manera racional y objetiva. El encuentro de la verdad es el fruto que se obtendrá al final de ese proceso.
A nivel Macrocósmico, es decir, a nivel de la humanidad, también se pone de manifiesto ese proceso de cambio de la conciencia. El Hijo de Dios, antes de adoptar la falsa creencia en la separación, gozaba de la Comunicación directa con Su Creador. Podríamos decir que, al igual que la criatura en el vientre materno se encuentra unido a su madre a través del cordón umbilical, el Hijo de Dios, también se encuentra unido a Su Padre, pues forma parte de Su Misma Mente.
La creencia en la separación es el resultado del uso voluntario de la labor creadora de la mente. El deseo de ser diferente a Dios, de ver las cosas de manera individual, fue lo que llevó al Hijo de Dios, a fabricar un mundo en el que ya no imperaban las Leyes de la Creación. Ese mundo no fue creado desde el Amor, sino que vino a establecer la ley de la división.
El uso de la mente para satisfacer el impulso del deseo, motivó la fabricación de un sistema de pensamiento basado en lo dual, en el miedo, en la culpa y en lo temporal. Se vislumbran nuevos estados de energía, entre los cuales se encuentra la energía densa de la materia.
La identificación con ese mundo material y la aparición de lo concreto, llevó al hombre a perder su conexión directa con la Unidad Creadora y adquirir una nueva personalidad a la que hemos llamado ego.
Este tránsito de consciencia dio lugar a la creencia del “pecado”; a la existencia del cuerpo como la única realidad; al miedo, como efecto de la transgresión; a la culpa, como vía de redención y a todo un sistema de creencias que nos llevó a vernos como seres separados del Creador y de los demás seres.
El Amor o la Vía de Cristo, nos libera, nos salva de ese encadenamiento de errores y nos permite retornar a la Plenitud del Edén, al Cielo, nuestro verdadero hogar. Recuperamos la Visión Santa de la Unidad que nos relaciona con todos nuestros hermanos, con los que compartimos una sola mente.
Ese estado de consciencia nos lleva a bendecir a cada uno de nuestros Hermanos y a comprender que nuestra relación con ellos es la única vía de salvación.
Ejemplo-Guía: "¿Cómo ves a tu hermano? ¿cómo tu enemigo o cómo tu salvador?
La respuesta a esta pregunta todos la sabemos y podríais pensar que no es necesaria plantearla. Pero el objetivo de hacerla debemos verlo como una invitación a reflexionar sobre nuestro modo de relacionarnos con el mundo.
Podemos seguir quejándonos, sintiéndonos víctimas y agresores a la vez, pero si no renunciamos al odio, a la ira, al ataque, si no cambiamos nuestra creencia en la separación, no podremos cosechar más que vivencias donde el dolor, el sufrimiento, la muerte, se conviertan en los principales protagonistas.
La lección de hoy es pura terapia sanadora. Una mente al servicio del miedo, es una mente enferma. Verá y percibirá un mundo enfermo.
Tendremos que elegir de nuevo, apostar por una nueva visión si queremos que las cosas sean diferentes. Debemos sustituir la visión del cuerpo, por la visión espiritual. Abandonar el juicio y la condena y en su lugar, compartir nuestro perdón y nuestra voluntad de corrección.
La lección de hoy nos propone un ejercicio que nos ayudará a ver a nuestros hermanos desde la percepción correcta. Estamos tan acostumbrados a dar credibilidad a aquello que somos capaces de ver, oír, sentir, que hemos delegado al olvido, su verdadera realidad, la que en su expresión de Luz alimenta al campo sensorial. El Hijo de Dios no es un cuerpo, es un Ser Espiritual, es Mente.
Si eliges cada día, cada instante, ver con los ojos de la mente, donde se haya la Fuente de lo que somos, estaremos utilizando nuestra condición más sagrada y bendita, estaremos expresando nuestra santidad Crística y esa visión se comparte con nuestros hermanos, pues, las partes dan lugar a la unidad.
¡Bendito seas hermano por permitirme ver mi santidad en tu sagrado espejo, en tu sagrada Consciencia Crística!
Dame tu bendición santo hijo de DIOS. Estoy en la luz,en paz,en amor,en néctar y en armonía.
ResponderEliminarDame tu bendición santo hijo de DIOS. Estoy en la luz,en paz,en amor,en néctar y en armonía.
ResponderEliminarDame tu bendición Santo Hijo de Dios. Graciasssss infinitas
ResponderEliminarGracias J.J
ResponderEliminarYo quiero tu bendición...hermano y Santo Hijo de Dios. Gracias JJ
ResponderEliminarBendíceme santo hijo de Dios para recordar que no soy este cuerpo, 0 que realmente soy un espíritu conectado con la mente de Dios y con todas las mentes porque todos somos unicidad, un hermano es todos los hermanos. Mi ser cristico sale del mundo del ego y lo disuelve cuando puedo mantener pensamientos de amor y paz es una gran tarea, yo ahora puedo permanecer más tiempo en la luz de los pensamientos de amor, aún cuando me doy unos paseos por el ego pero ya estoy más consciente y puedo salir de los pensamientos de ataque que me llevan a fabricar un mundo que no es real por una nueva percepción que me permite ver el cielo en la tierra. Dame tu bendición santo hijo de Dios.
ResponderEliminarGracias Juan José.Te Abrazo fuerte desde aquí que es allá 🤗
Gracias por tu bendición hermano,porque en ti puedo ver mi perfecta naturaleza💙💙💙💙💙💙💙💙💙💙💙💙🙏🙏🙏🙏🙏🙏🙏🙏🙏🙏
ResponderEliminarVeo un Montón ndo Santo y Perdonadoen el Amor 🙏🙏🙏🙏🙏✨✨✨✨✨✨🤍🤍🤍🤍🤍💙💙💙💙💙🥳🥳🥳🥳🥳🥳
ResponderEliminar